Visitamos el barrio judío de Brooklyn en sábado. A este barrio se llega desde Manhattan a través del puente de Williamsburg el metro pasa por el puente en un tramo descubierto, se puede ir andando, si hace buen tiempo es un agradable paseo.
Al llegar el barrio estaba desierto.
De pronto empezaron a salir judios ortodoxos de un templo y la calle se llenó de familias. Suponemos que celebraban el Sabbath.
La calle parecía de otro siglo o de otro planeta.
Nosotras de rojo, ellos todos de negro riguroso.
Las mujeres con un extraño peinado que nos llamó la atención hasta que nos dimos cuenta que eran pelucas. Nos enteramos que las mujeres casadas están rapadas al cero y con peluca porque el pelo se considera una atracción para otros hombres.
Los hombres vestidos con sus bekishes negros y luciendo sobre sus cabezas un extraño sombrero. Casi todos llevan barba y largos tirabuzones a los lados de la cabeza.
Nos parecieron el antídoto de la lujuria.
Los niños también los llevan.
Aquí os dejamos las fotos que tuve que hacer a escondidas porque al ver la cámara te miraban como diciendo ¡A mi ni se te ocurra!
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